Capítulo 10~ Just a dance

-No está nada mal…-Digo saboreando unos simples macarrones con tomate y algo de queso. Justin me mira orgulloso y sonríe-Justin, son sólo macarrones. Hasta a un niño de 3 años le saldrían bien los macarrones.

-Lo que digas, pero estos están perfectos-Dice con un tono un poco ofendido.

-Era broma, Bieber-Le digo tocándole el hombro con mi mano, ya que estamos comiendo uno al lado del otro-No te piques-Le guiño un ojo y un brillo aparece en su mirada.

-No hagas eso, Faith. No es seguro-Dice lamiéndose los labios. Sabe que le he mirado a los labios, mierda.

-¿Por qué no?-Arqueo mis cejas suavemente. Se acerca a mi oído después de mirarme.

-Porque me dan ganas de cogerte y no dejarte en días-Dice susurrándome. Un escalofrío recorre mi espalda y me estremezo, hago una pequeña mueca inintencionada y Justin frunce el ceño-¿Estás bien?

-Sí sí-Me muerdo el labio nerviosa mirando al plato de macarrones-Es que no me esperaba esa respuesta…

-Lo siento-Por el rabillo del ojo veo que se encoge de hombros y yo suelto una risita-No puedo evitarlo, ya lo sabes.

-Inténtalo-Le digo mientras me mojo la yema de mis dedos en el vaso de agua y salpico a Justin con él.

-¿¡Qué fue eso!?-Dice riendo y limpiándose con la mano. Me encojo de hombros y sonrío dulcemente. Luego los dos soltamos una carcajada-Eres idiota, Faith.

-Gracias Justin, yo también pensé eso de ti cuando te conocí-Digo sin pensarlo, era verdad. Siento mi pelo frío, Justin ha cogido su vaso de agua y me lo ha echado casi entero por encima de la cabeza.

-¡Serás capullo!-Le digo pegándole un manotazo en el hombro. Él no deja de carcajear por la cocina, tirándose por el suelo incluso. Ese comportamiento me recuerda a un niño pequeño y río también.

-Ten, anda-Dice ofreciéndome un trozo de papel mientras intenta reprimir la risa. Arqueo las cejas-¿Mejor una toalla, no?

-Ahá-Le digo intentando colocar mi pelo un poco. Noto como el agua traspasa mi camiseta y moja toda mi piel, un escalofrío hace que se me ponga la piel de gallina.

-Vamos ven-Justin coge mi mano y después me mira dubitativo por haber hecho ese gesto. Yo asiento lentamente y atravesamos su cocina y su salón hasta  llegar a la planta de arriba. Pasamos su habitación, y mil recuerdos atraviesan mi mente. Oigo a Justin reír.

-¿Qué?

-Nada nada…-Niega con la cabeza- Que yo también lo recuerdo.

Noto como el calor sube a mis mejillas, pero por suerte Justin está delante y no me ve, lo agradezco. Llegamos a una habitación vestidor y al momento me sorprendo, es una habitación más grande aún que su propia habitación, y tiene más de 20 armarios.

-Vaya-Le digo mirando a todos los sitios. La casa de Justin nunca va a dejar de sorprenderme.

-Lo sé, es increíble ¿Verdad?-Dice con un tono de felicidad en su voz-Toma-Justin me estiende algo en sus manos-Puedes secarte con esta toalla y ponerte esta camiseta mía después, si quieres-Dice un poco nervioso la última parte, y yo lo noto.

-Está bien, gracias Justin-Le digo sonríendole. Veo como su cuerpo se deshincha y su rostro se relaja, también sonríe.

-No es nada-Coje otra vez mi mano mientras me mira, y sé que estoy a punto de caer otra vez-El aseo está ahí al final-Dice carraspeando. Asiento y él se va, dejándome sola en esta enorme habitación.

Encuentro a Justin unos minutos después en el sofá de su habitación, tiene una guitarra en sus manos y está tocando unos acordes.

-Vaya, suena bien-Digo acercándome a él. Sus ojos se abren mucho y veo como me recorre todo el cuerpo con la mirada. Su camiseta es tan larga que tapa mis shorts, y parece que solo llevase la camiseta. Me siento a su lado cruzando las piernas delante de mí.

-Gracias-Se lame los labios, aún sigue mirándome-Te queda muy bien… la camiseta.

-Si, me queda enormemente bien-Digo irónicamente mientras río.

-En serio, creo que voy a regalarte esa camiseta. El mundo debería verte con ella puesta porque estás preciosa-Levanto la mirada y miro directamente a sus ojos, no vacilan ni un poco.

Lo está diciendo completamente en serio. Ninguno deja de mirar al otro, ni siquiera cuando Justin aparta un mechón de pelo de mi cara y me lo coloca detrás de la oreja. Aprovecha ese movimiento para acariciarme la mejilla dulcemente. Necesito aire. Veo como se va acercando poco a poco a mí, y noto como apoya su mano extendida en mi pierna. Sin dejar de mirarle, pongo mi mano sobre la de él y cierra la suya rodeando la mía. Con su otra mano sostiene mi barbilla y se sigue acercando. Suspiro lentamente, nuestros labios están a punto de tocarse. Por mi cabeza pasan mil cosas, y es ahí cuando pierdo el contacto de sus ojos porque miro hacia abajo y sonrío un poco negando con la cabeza.

-¿He hecho algo mal?-Dice apoyando su frente contra la mía.

-Claro que no, pero esto… no puede ser así-Le susurro. Justin suelta un suspiro cansado, y automáticamente me odio por tener que hacer esto.

-Lo siento-Dice tan bajito que apenas le he oido.

-No lo sientas, por favor. Sólo-Cojo su cara entre mis manos y le miro de nuevo a los ojos, está disgustado-No podemos, ya lo sabes.

-Desearía que no fuera así. Esto es una mierda-Dice sonriendo débilmente. Yo le beso la mejilla y le sonrío.

-Lo sé.

(…)

Hemos decidido ver una película para pasar la tarde, pero lo que yo no sabía era que Justin tenía su propia sala de cine en el sótano de su casa, con sofás enormes que parecían camas, y tan cómodos que podría vivir en ellos toda mi vida.

-¿Qué tal si ponemos alguna de miedo?-Pregunta.

-Mm no sé, no me apetece mucho-Le digo mordíendome el labio.

-Está bien-Vuelve a girar su cabeza hacia las estanterías, donde juraría que tiene más de 100 películas-¿Qué tal si vemos Never say never?

-¿Qué?-Le digo, no conozco esa película.

-Es la película que hicieron sobre mí hace un par de años-Dice sosteniéndola en su mano. Mierda, claro que sé cual es. Había leído que Justin documentó su vida en una película pero no sabía el nombre, ni siquiera la he visto.

-Está bien, veamos esa-Le digo con una sonrisa, noto mis mejillas arder. Justin se sienta a mi lado en el gran sofá y me toca el hombro para que le mire. Sus labios forman una sonrisa de lo más dulce.

-No pasa nada si no lo sabías, Faith. No es que tengas que saber todo sobre mí sólo porque soy famoso y mi vida esté expuesta públicamente.

-Ya, pero no sé…-Muerdo mi labio.

-Ahora te doy la oportunidad de verla con el propio protagonista-Río suavemente mientras Justin se acomoda hacia atrás-Osea yo.

-Egocéntrico-Susurro.

-Te he oído-Vuelvo a reír y Justin pulsa el Play.

Estaba realmente emocionada por la película, cada cosa que salía me sorprendía aún más, y eso que si no conociera a Justin pensaría que todo son mentiras, pero ahora que le conozco y que de hecho, sé que no es el niñato que tiene subida la fama como los medios de comunicación le calificaban diría todo lo contrario a lo que anteriormente pensaba. Al poco tiempo veo a través del rabillo del ojo a Justin apoyar su brazo en el sofá, justo por detrás de mí. Mi reacción automática es ponerme rígida, pero al segundo me arrepiento, no quería hacer eso. Justin lo nota y aparta el brazo para cruzarlo con el otro en su pecho, mierda. Intento pensar algo, y se me ocurre algo. Me dejo caer suavemente hacia el hombro de Justin, apoyando mi cabeza en él. Subo la mirada y le sonrío, él me devuelve una sonrisa enorme. Cojo su brazo y sin pensármelo dos veces lo pongo alrededor de mi cuello, ahora mi cabeza está apoyada en su pecho y su mano me rodea.

-¿Mejor?-Le susurro.

-Nunca he estado mejor-Dice besando mi cabeza. Ese gesto hace que mi médula espinal mande descargas eléctricas a todo mi cuerpo, sin poder evitarlo-Ojalá todo fuera tan fácil como esto.

-Lo sé-Digo suspirando. ¿Es probable que Justin sienta lo mismo que yo hacia él? 

YA ESTOY AQUÍ. Mil perdones por no subir antes, pero he tenido unos días un tanto complicados y exámenes. Y ya para colmo de todo, mi inspiración se tomó unas vacaciones sobre esta historia. Creo que poco a poco la voy retomando y espero poder subir un buen capítulo pronto. Mientras tanto, espero que disfrutéis de este otro, os quiero, a todos los que seguís ahí! <3