miércoles, 27 de marzo de 2013

Capítulo veinticuatro.

No podía contarle a Justin que su padre era Bieber, el famoso pandillero de Stratford, el antiguo jefe de mi banda, no ahora. No necesitaba un adivino para averiguar que, además de disgustarle, sería capaz de romper conmigo solo para que no me hagan daño.


***

-Muchas gracias por todo Ryan.-Le decía su amiga en medio de un efusivo abrazo.
-No hay de qué Ale, pero aún que os ayude a esconderos y a ser vuestra cuartada, sabes que esto no me parece bien.-Dijo el chico con voz pesada.
-Lo sé, y siento haberte metido en todo este lío. Te debo una-Ale le guiño un ojo a su amigo, a la vez que este reía.
-Tienes razón, me estoy jugando el cuello por ti.-Su tono era más bien animado, pero tanto él como ella sabían que esto no tenía nada de divertido.

Al poco tiempo de irse Ryan y haberle prestado su casa a Ale, apareció Justin, con aires de superioridad, lo que hizo reír inmediatamente a Ale.

-Hola.-Dice él dándole un corto beso en los labios. Ale le empujó dentro de la casa, por precaución. A continuación, soltó una sonora carcajada.-¿Qué pasa?
-¿Qué haces con esa chaqueta? No te pega nada, Justin-Ale intentaba reprimir sus ganas de reírse, pero ver a Justin, con esa chaqueta de cuero, y con aires de chico malo le hacía reír. Eso sin dejarse su alborotado pelo, que lo hacía más sexy de lo normal.
-Pensé que te gustaría...-Agacha su cabeza fingiendo un puchero y Ale se la levanta nuevamente cogiéndole de la barbilla.
-¿Sabes qué? Vamos a quitarte esto-Justin sonríe de lado mientras ella le quita la chaqueta, sin él articular un músculo. La muchacha contemplaba el cuerpo de él, cubierto por una camiseta blanca de manga corta-Ahora estás muy sexy-Dijo, y le alborotó más aún el pelo.
-¿Ah sí?-Justin camino hacía Ale, haciendo desaparecer la corta distancia que había entre ellos. Y cuando Ale acercó su frente para darle un beso, Justin la cogió de la cintura y se la cargó a uno de sus hombros.
-¿QUÉ HACES? ¡JUSTIN PARA!-Decía ella sin dejar de reír, apaleándole la espalda.
-No, ahora esta es mi venganza.-Justin caminó con ella colgada al hombro hasta la habitación de Ryan, que no quedaba muy lejos del salón donde estaban.
No era muy grande pero tenía una cama confortable y cómoda, que era lo que ellos necesitaban en este momento. Justin soltó de golpe a Ale en la cama, cayendo encima de ella. Él empezó a darle cortos besitos por el cuello, por su pecho, por su mejilla, por sus labios, haciéndole cosquillas a Ale, que no paraba de soltar berridos y carcajadas. Pero en un momento de debilidad de Justin, ella se abalanzó a su cuello, pegándole un pequeño mordisco que hizo que él soltará un gruñido.
-¿Vas a parar de hacerme cosquillas?-Preguntó ella, sonriente. Justin se quedó, por unos instantes, colgado de su sonrisa. Esos pequeños hoyuelos que le salían en la comisura de sus labios, le volvían loco. Ese pequeño lunar que tenía justo en medio de su mejilla derecha, que solo se hacia notar a una distancia demasiado corta, a su distancia. Sin darse cuenta, él estaba sonriendo mientras ella le llamaba, hasta que finalmente reaccionó.
-¿Me escuchaste?-Le preguntaba ella con voz de niña chica.
-No, estaba mirando tu ridícula sonrisa.-Le dijo él, y al instante Ale notó como un calor le subía hasta sus mejillas.
-Eres un idiota.-Le dijo esta vez ella, sacándole la lengua. Justin hábil, se lanzó a ella, mordiéndosela, a lo que Ale río.

Al pequeño mordisco se unieron otros tantos, y terminaron siendo dulces, salvajes y tiernos besos. Justin pasó su lengua por los labios de Ale, a lo que su cuerpo respondió con un escalofrío que le recorrió desde su nuca hasta los pies. Pero ¿Qué importaba ahora? Ella sabia lo que eso significaba. Le gustaba, le gustaba de verdad.
-Nunca pensé que fueras a gustarme-Dice Ale debajo de él, sobre sus labios. Él frunce el ceño, pero luego sonríe egocéntrico.
-En cuanto cruzamos la primera palabra supe que ibas a ser mía-Dijo esta vez él con aires de superioridad.
Ella se quedó pensando en qué contestarle, porque realmente le sacaba de quicio, a la vez que le encantaba. Antes de que ella dijese algo, Justin atrapó el labio de ella, mordiéndolo ferozmente. Ale consiguió rodar y ponerse encima de Justin besándole salvajemente, quitándole la camiseta, que ya empezaba a sobrar. El calor empezó a ser notable en aquella habitación, donde sus dos cuerpos ardían, deseando más. Apenas abandonaban los labios del otro, para decir alguna estupidez, o para besar alguna parte de su cuerpo, especialmente Justin, que estaba obsesionado con la clavícula de Ale. Le daba pequeños besos sobre esta, subiendo hasta su cuello donde mordió. Un gruñido salió de la garganta de Ale, y que a Justin le hizo reír, realmente disfrutaba haciéndola esperar.
-Como me dejes marcas voy a matarte. Y tendré que hacerlo con Cameron para que no llame la atención-Dijo ella bromeando.
-No voy a morderte más-Justin clavó su mirada en la de ella-En el cuello-Le guiño un ojo y Ale soltó una risita. 

Los dos se encontraban ya en ropa interior, queriendo más y más. Ale comenzó a deslizarse por el cuerpo de Justin, dejando una hilera de besos por su cuello, bajando por su garganta, donde él soltó un grito ahogado que hizo sonreír a Ale en el pectoral de Justin. Siguió bajando por sus abdominales, que además de besarlos, los delineó con su dedo suavemente, acariciándolo. Cuando llegó al ombligo, dibujo besos a su alrededor, y cuando miró abajo, Justin soltó una carcajada.
-Esta vez eres tú la que me estás haciendo esperar.-Dijo en un suspiro.
-Lo sé.-dijo ella mordiendo, justo debajo de su oblicuo, la cinturilla de los calzoncillos de Justin. El arqueó la espalda, y juraría que iba a estallar ahí mismo, al ver a Ale descubrir sus dientes.
-Déjate de esperas.-Le dijo agarrándola de la muñeca salvajemente, pero no tanto como para hacerla daño.
La puso bajo él, inmovilizándole los brazos a la altura de su cabeza. Hubo un momento, un segundo, en el que ninguno de los dos reía, solo había miradas, cargadas de un sentimiento mutuo  En un abrir y cerrar de ojos volvían a besarse, esta vez lo más fuerte que sus labios les permitían. Ale soltó un suspiro, que Justin aprovechó para colarse en su boca, enredando su lengua con la de ella, el juego había empezado.


Alejandra.

Me pesaban tanto los ojos que casi no podía abrirlos, hice un esfuerzo, pero la luz proveniente de la ventana me hizo volver a cerrarlos. Lleve una mano a mis ojos, para restregarlos y se adaptaran lentamente a la luz de los primeros rayos de sol del día. Levanté suavemente la cabeza unos centímetros, y la escena me hizo sonreír al momento. Me encontraba apoyada en el pecho de Justin, acariciándolo, mientras él me sostenía con su brazo y su mano acaba en mi pelo, probablemente estuvo rizando mi pelo sobre sus dedos hasta que nos dormimos, sí. Una fina sábana logra taparme un poco más arriba de mis pechos, a diferencia de Justin, que solo le llega por la cintura. Él se movió y volví a apoyar la cabeza sobre su pecho, sin hacer el más mínimo ruido. A los segundos, el brazo de Justin se posó sobre mi cara, casi sin dejarme respirar. En ese momento supe que ya estaba despierto, y cuando visualice una pequeña sonrisa sobre sus labios, lo confirmé.
-Buenos días tonto.-Le digo besándole, apartándole un dorado mechón de pelo que se le cuela entre los ojos. Estos me miran adormilados, pero con un color miel que serían capaces de hacerme ceder a cualquier chantaje si me lo pidieran.
-Hola imbécil.-Dice besándome la frente.
-Ey! Ese insulto es mío-Digo haciendo un puchero-No puedes quitármelo.
-Está bien.-Él suelta una pequeña carcajada y me coge de la mano, enredando sus dedos con los míos y dejándolas posadas sobre su pecho, justo en frente de mí.
-Tendrás que inventarte otra cosa para llamarme, porque ese insulto es mío-Le dije divertida, incorporándome.
-Serás mi pequeña.-Dijo curvando sus labios. Yo fruncí el ceño.
-Suena un poco cursi...-Dije encogiéndome de hombros-Pero me gusta.
-Definitivamente eres tonta-Dice acercándose y depositando un pequeño beso en mi nariz, que me hace reír. Luego le doy un leve golpe en el brazo.
-¿Que fue eso?-Me pregunta desconcertado.
-Eso es, por llamarme tonta idiota-Le digo, orgullosa de mi golpe. Él sonríe arrogante, esa sonrisa-Y no me mires así.
-¿Así como?-Carcajea.
-Ya lo sabes, miras a las chicas así. Esperando que se enamoren de ti...-Digo levantando las manos, dramatizando-Pero no funciona conmigo así que déjalo-Finalizo y pongo la mano sobre su mejilla haciéndole girar la cara mientras suelto una pequeña risita que él no logra oír.
-Tienes toda la razón.-Dice cogiéndome con sus manos, poniéndolas a ambos lados de mi cara-Porque a ti, mi pequeña, ya te he enamorado.-Y simplemente me besa rápido, sin dejarme apenas disfrutar de sus labios.


Solo os pido un favor, para saber que habéis leído el capítulo, ¿Podéis darte RT Aquí por favor? 

Os quiero :)

domingo, 24 de marzo de 2013

Capítulo veintitrés

Una oleada de pensamientos se pegaron a la cabeza de Ale, al igual que a la de Justin. Se necesitaban el uno a el otro, pero si la banda se enteraba de esto, Ale acabaría muerta, eso seguro. Y Justin lo último que quería era dañarla, pero también sabía que no podía separarse de ella.
-Justin...-Ale apretó con fuerza la mano de Justin. Mientras él le prestaba toda su atención, ya que había pasado un largo rato desde que pusieron la tele y ninguno se atrevía a decir nada-No te pido que me acompañes en esto, pero siento que es la única manera de mantenernos juntos.
-Créeme Ale, voy a hacer todo lo que esté en mi mano para estar contigo-Dijo mientras su mandíbula se contraía, esperando a algo, una opción que les mantuviera juntos.



***

Alejandra.

Como cada mañana, me despierto gracias a los gritos de Héctor. Suspiro pesadamente y me levanto más enérgicamente de lo normal. Cuando termino de ducharme, vestirme y maquillarme, bajo a desayunar.

-¿Qué coño hiciste ayer?No apareciste-Me dice Héctor masticando su desayuno. Lo noto repugnante que hable mientras está comiendo, pero decido callarme.
-Estuve por ahí.
-Sabes que a Frank le gusta saber que hacéis siempre-Farfulla.

Raramente, hoy me termino todo el desayuno, y noto la misma sensación de siempre. Subo rápidamente al baño y me pongo junto a la taza, me arrodillo ante ella. Quedo mirando el fondo unos segundos, y por una vez en mucho tiempo, hay algo dentro de mí que me dice que no lo haga, que me veo bien así como estoy. Me levanto y me miro en el espejo, y es cierto. Por primera vez en mucho tiempo me siento bien. Noto como mis mejillas han tomado un color rojizo que no se va desde este fin de semana. Noto como yo misma me siento a gusto con mi cuerpo. Y sonrío. Pero a pesar de verme así, embadurno mi cara y mis ojos de maquillaje. Cojo mi mochila y me dispongo a coger mi moto. 
De camino el aire se me estampa en la cara, regalándome una bocanada de aire fresco para aclarar y poner en orden mi cabeza. Aún no sé como sobrellevar todo esto, yo no estoy hecha para hacer este tipo de cosas. Eso sin mencionar que arriesgo totalmente mi vida y que si alguien de la banda se entera, harán algo peor que trabajar para ellos conmigo. Voy decidida hacia mi grupo, estacionado en la entrada del instituto, como cada mañana. Mi mirada se cruza fugazmente con la de Justin, que está, junto con Mike, al otro lado de la entrada principal. Hago una mueca y suspiro.

-¡Ale!-Brit corre hacia mi y me da un efusivo abrazo, que yo le correspondo con unas cuantas palmaditas en la espalda-¿Dónde te metiste el sábado?
-Uno de los del club me sacó a empujones-Miento. Pero ella asiente con una sonrisa y parece habérselo tragado-¿Dónde está Cameron?¿No ha llegado?
-Ese cabrón dejo a la banda en buena posición la otra noche, no estuvo nada mal-Comentó Chris. Le fulminé con la mirada, ya que no quería saber su opinión al respecto. Cuando Cameron llegó, nos dimos un efusivo beso, para después alejarnos del grupo y decidir saltarnos las primeras horas de clase.

-Cameron, siento haberte dejado solo en el club, pero me sacaron-Me excusé mientras soltaba el humo de un tranquilizador cigarro.
-No te preocupes nena, lo tenía todo controlado-Me guiña un ojo y me rodea con su brazo mi cintura. Sonrío forzudamente. ¿Realmente estoy preparada para esto?



Unas semanas después...

Justin.

El día ha sido eterno, y el entrenamiento demasiado cansado. Soy yo o pensaba que no iba a terminar nunca. Entramos al vestuario y me quito el equipo lentamente, más de lo normal. Cuando entro en la ducha, los demás ya casi han terminado, sonrío para mis adentros. Lo estoy consiguiendo.

-Tío, tardas mucho-Refunfuña David mientras da los últimos toques a su pelo.
-No me esperéis si queréis-Les digo desde la ducha.
-Está bien, nos vemos mañana.

Por fin estoy solo, y puedo pensar con claridad. Necesito autocontrol, eso es. Pero no puedo ocultar el ataque de celos que me da cuando veo a Ale con Cameron morreándose por las esquinas, como si yo no fuera nadie en su vida. Como si nunca hubiera formado parte de ella. Unas manos cálidas y suaves recorren mi cuerpo, y al instante sé quien es.

-No sabes cuánto te he echado de menos-Me susurra en el oído. Yo sonrío y me giro, le cojo las manos.
-Es muy agotador. Además, no puedo evitar besarte cuando te tengo tan cerca-Solo nos separan unos 10 centímetros, me muero de ganas por besarla ya, llevo todo el día soñando con eso. De su boca sale un 'hazlo' que me hace reír, porque sé que ella también está impaciente. Rozo su nariz contra la mía y finalmente le doy un corto beso en los labios. Ella al instante vuelve a acercarse a mi boca y me besa con más pasión. Noto como sonríe en mis labios y cuando yo la muerdo el labio, de su garganta sale un pequeño gruñido.
-Ale-Digo separándome de ella-Deberíamos irnos de aquí, puede vernos alguien.
-Ya ha salido todo el mundo...-Enreda sus brazos alrededor de mi cintura.
-No quiero que nos vean, y que esto se vaya a la mierda-Ella pone el rostro más serio y aprieta la mandíbula.
-Está bien-Dice al fin. Le doy un beso tosco mientras me lío una toalla a la cintura-Te espero fuera, no tardes.
-¿Qué? Yo no tardo nunca-Digo con una sonrisa, esa que sé que tanto le molesta, pero que a la vez le vuelve completamente loca.
-Si no fuera porque te he visto, juraría que eres una chica por lo que tardas en arreglarte-Oigo su risita mientras se aleja por el pasillo, y a mí me deja completamente alocado. Llevamos semanas así, y no quiero que esto acabe. Si tengo que mantenerla en secreto, ella será mi secreto. Pero será solo mío. Intento arreglarme lo más rápido posible para tener algo por lo que discutir mas tarde, porque me encanta su cara de niña enfada cuando no le dan la razón en algo. Sonrío al recordarla.

-¿Te apetece que vayamos a mi casa?-Le pregunto mientras le rodeo con mi brazo por sus hombros, no sin antes haberme asegurado que en el instituto no quedaba nadie.
-Claro, donde si no vamos a ir-Dice sarcástica. La miro-Lo sé Justin, era una broma. Es que a veces me siento cansada de llevar esta mierda en secreto. No entiendo por qué no podemos ser como Brit y Mike.
-Porque te recuerdo que tú tienes un cargo mayor en la banda. A demás, ya lo hemos hablado.
-Es verdad, lo siento. Sé que para ti esto también es duro-Me da un beso en la mejilla y vamos hasta mi coche, donde ella tiene que, como siempre, esconderse en la parte de atrás.



Alejandra.

-¿Quieres algo de beber?-Me grita Justin desde la cocina.
-Sí, un refresco-Le digo a voces, suerte que estamos solos en su casa. Rebusco entre el armario donde está colocada la televisión del salón, las encontré-¿Qué película quieres ver?
-No lo sé, me da igual-Dice masticando unos gusanitos mientras se acerca con una bandeja con los refrescos y la comida. La deja en la pequeña mesa que hay en frente de la televisión, y yo le dedico una sonrisa de agradecimiento, después de darle un sorbo a mi coca cola-¿Y bien?¿Has elegido alguna película?-Dice recostándose en el sofá, y abrazándome contra él.
-No...-Río levemente-Me apetece hablar-Justin enarca una ceja divertido.
-¿Hablar?¿De qué?-Le doy un pequeño beso en los labios para que sepa que no es nada malo, e instantaneamente su expresión se relaja-¿De qué quieres hablar Ale?-Repite, con voz pausada.
-De ti, de tu pasado. ¿Cuándo te fuiste de Stratford?-Le pregunto interesada mientras cojo un gusanito y me lo llevo a la boca. 
-Tenía 8 años-Trago saliva, y al momento me arrepentí de habérle preguntado. Le dí un apretón de mano para que le reconfortara-Cuando mi padre murió-Mi boca formó un 'O' perfecta. Intantando disimular mi sorpresa le dí un beso sonoro y dulce.
-Lo siento Justin, no quería...
-No pasa nada nena-Me cortó-Quiero contarte toda la historia-Asiento y él sonríe levemente-Cuando pasó esto mi madre quiso alejarme de la vida de mi padre, de los problemas que le habían llevado a la muerte. Quería protegerme y con ayuda de mis abuelos y algunos ahorros secretos de mi padre, conseguimos trasladarnos a España, donde empecé una nueva vida-A medida que iba procesando la información que Justin me daba, más me sorprendía-Pero hace unos meses, recivimos una llamada del hospital, mis abuelos habían tenido un accidente de coche-Su cara se descompusó y le besé la mejilla, apoyándole-Mi madre y yo decicimos volver aquí, para cuidar de ellos, a pesar de que mi madre no dejaba de repetirme en el viaje que tuviese cuidado aquí, que aún que había pasado mucho tiempo este lugar seguía siendo inseguro para mí.
-No entiendo algo Justin-Le digo algo confusa-¿Por qué este lugar es inseguro para ti?¿Que era tu padre?-Le digo algo desconcertada, pero cuando terminé la frase, ya sabía lo que él era, y todos mis presagios serían verdad.
-Mi padre era pandillero como tú, Ale. Por eso estoy tan obsesionado con que dejes esa mierda de vida-Dice con un tono de voz nostálgico-No quiero perderte a ti también por esto...
-No lo harás, Justin-Le sujeto la cara con mis dos manos a ambos lados de esta y le beso dulcemente.
-Se llamaba Jeremy, tal vez habías oído hablar de él.
-En absoluto-Le digo, automáticamente. No podía creer que todo lo que había pensado en un principio era verdad.
-Por eso odio que me llamen Bieber, porque a mi padre le llamaban así, por su apellido.
-Cariño...-No podía articular palabra, me había quedado tan sorprendida que no sabía que decirle, solo me tiré a él, abrazándole con fuerza. Justin acogió mi abrazo y me apreto con su pecho, y cuando le escuché sollozar, mi corazón dio un vuelco.




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Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa :)))))))))) Bueno pues ya os traigo otro nuevo capítulo, mas rápido de lo normal lol. Pero lo mejor esque estamos en vacaciones y que tengo mas tiempo de escribir. Lo peor esque la señorita Diana (PrettyBrownEyes) me ha enganchado a una saga de libros que no puedo dejar de leer, y tengo que ordenarme para leer y escribir JAJAJAJA. Espero que os guste mucho este capítulo, ya que lo he editado como 1000 veces. A partir de aquí las cosas se pondrán más interesantes(? Gracias por seguir leyendo, aún que no comentéis podéis darle justo abajo para saber que os ha parecido el capítulo. Os quiero<3

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martes, 19 de marzo de 2013

Capítulo veintidos.



En el anterior capítulo...

-Para...-Le advierto. Pero mi tono empieza a ser como mi cuerpo, vulnerable-¿Sabes lo difícil que es para mí evitarte?
-Es una tortura-Me corrobora-¿Sabes lo complicado que es verte por los pasillos besándote con otro tío y mirar hacia otro lado, como si no me importase?
-¿Te crees que no me pasa lo mismo?-A la mierda con esto, le miro a los ojos y empiezo a soltar palabras por mi boca-Ya me he cansado de fingir que no me importas-Él sonríe y acaricia mi mejilla, y me doy cuenta que me ha limpiado una lágrima, que escapó de mis ojos.
-No he dejado de pensar en ti desde el día en que te vi por la ventana, montada en tu moto.
-No he podido dejar de odiarte desde el día que te vi con esa sonrisa de niño tonto que tienes-Le digo acercando mi nariz con la suya, y haciéndolas rozar-Realmente ya me gustabas.
-Muy bien, dejémonos de confidencias, quiero besarte-Dice pasando su dedo por mis labios. Él se relame los suyos y muy despacio me besa. Esta vez no quiero apartarle, y mil cosas estallan en mi estómago, es pura adrenalina. Es como si nada pudiera hacerme sentir mejor, y ese sentimiento me asustaba tanto como me gustaba.


~Alejandra~

-Vamos arriba-Me dice Justin casi en un susurro sobre mis labios. Yo asiento y él sonríe. Nos separamos un segundo y ya siento que vuelvo a necesitar otro de sus besos. No sé lo que esta pasando, no sé lo que estoy haciendo. Pero si sé que me he cansado de fingir que no me importa él. Cuando entro a la habitación de Justin, él me agarra por detrás y muerde el lóbulo de mi oreja, y yo ya siento que estoy perdida.
-Eres perfecta-Me susurra al oído.
El corazón se me encoje un segundo, y me doy la vuelta, mirándole a los ojos. Él enarca las cejas en un gesto divertido y susurra un "Qué" Yo niego con la cabeza y me enrollo en su cuello, volviendonos a besar más hondamente. Se tira sobre la cama y yo me pongo encima a horcajadas, sin parar de besarnos un segundo. Pronto el calor nos invade y la ropa empieza a sobrarnos. Rodamos sobre la cama y ahora es él el que está encima de mí. Yo río y el besa uno de mis hoyuelos, siento como mis mejillas cobran color. Mi camiseta desaparece y Justin empieza a dejar una hilera de besos por mi cuello hasta el filo de mi sujetador negro de encaje. Lo acaricia con la mano y me mira serio.
-No quiero que volvamos a estar mal nunca más-Me dice en un tono nostálgico. 
-Sabes que las cosas no son tan fáciles...
-Shh nena-Me pone un dedo en mis labios, sellándolos completamente-Esta noche nada es complicado entre tú y yo. Porque solo somos eso, un tú y yo.

Instantáneamente una sonrisa se forma en mis labios. Justin empieza a dar cortos besos a toda mi boca, de izquiera a derecha. Finalmente consigue hacerme reír y eso le da paso a introducir su lengua en mi boca. Juegan juntas y encajan a la perfección. Mentiría si dijera que no he estado soñando con este momento durante mucho tiempo. Esta noche no voy a pensar en nada, solo somos uno. Le quito la camiseta a Justin, y él no tarda en quitarme el sujetador, casi sin dejar de besarnos. Siento su erección sobre mí y suelto una pequeña risa, Justin muerde mi labio y yo gruño. Esta bien, él lo ha querido, es mi turno. Consigo ponerme encima de él de nuevo y quitarme los pantalones, y sí, estoy en bragas. Me deslizo sobre él y empiezo a darles suaves besos mojados desde detrás de su oreja, hasta su cuello, finalizando en su clavícula. 
-Ale, esto es una tortura-Dice acompañado de un gemido. Me acerco a su boca y le beso suavemente. Cuando me voy a girar, inesperadamente él agarra fuertemente mi trasero y me atrae más salvajemente hacía él, haciéndome saber que se muere de ganas por estar dentro de mí. Muerdo mi labio y asiento. Justin sonríe suavemente e, inesperadamente, se levanta conmigo a horcajadas y con sus dos manos sosteniendo mi trasero.
-¡Hey! ¿Podrías apartar tus manos de mi culo?-Le digo bromeando.
-No pienso hacerlo-Sonríe, con esa sonrisa de imbécil, la que me dejó completamente enamorada de él. Me sienta sobre su escritorio y mientras me besa, empieza a rebuscar algo entre los cajones. Uau, si en mi sueño era bueno, aquí se sobrepasa.
-Pensaba que íbamos a hacerlo en la cama, Bieber-Le susurro mientras él me besa el cuello.
-Tranquila cariño-Dice mirándome fijamente a los ojos, yo me quedo completamente colgada. Muerde mi labio, esta vez con fuerza. No sé si me dolió, pero lo que si se es que me puso aún más. Enarqué las cejas en forma de explicación-No me gusta que me llamen Bieber ¿Recuerdas?-Me levanta de su escritorio y yo me enredo en su cuello para no caerme, ya que siempre me pilla desprevenida. Está jugando conmigo y me gusta.
-¿Algún día me lo contarás?-Me sienta encima de él, pero ahora estamos en la cama y Justin me mira con ternura. Acaricia mi mejilla y me coloca un mechón de pelo detrás de la oreja. Su gesto parece de dolor ¿Qué?
-Algún día...-Dice en un suspiro. Decido acabar con esto de una vez y le tumbo hacia atrás, Justin ya no lleva los pantalones encima y bueno, está increíblemente sexy-No olvides que hoy tengo yo el mando-Rodamos sobre su cama y él ahora está encima, me quedo sorprendida, otra vez. Me da un beso tosco en los labios y se quita los boxers. Vamos a hacerlo.
-Ale-Se desliza sobre mí, y me coge la barbilla para hacer que le mire-Te quiero-Yo sonrio tiernamente e inesperadamente, me embiste suavemente, yo gimo.

Nunca había sentido tanto mientras lo hacía. No precisamente lo que siento ahora. Pero si me preguntarán, tampoco sabría a describirlo. Es como un huracán que arrasa con todo y que está consiguiendo arrancarme a mí también. Justin aumenta el ritmo de sus embestidas y con eso dejo de pensar, y le beso salvajemente los labios.
-Yo también te quiero Justin-Le suelto en un gemido. Él se ha quedado completamente sorprendido, porque ha abierto los ojos como si de platos se tratasen. Sonrío y poco después, juntos llegamos al climax.

(...)


~Justin~

Abro los ojos lentamente, y me encuentro la imagen más bonita que alguien puede ver, a unos centímetros. Sonrío y paso mi mano por su pelo, es suave, mucho. Le beso justo donde he pasado la mano y se remueve entre mis brazos, encogiéndose como una niña pequeña. De repente me entra un miedo que recorre todo mi cuerpo, y me aterra. Esto no durará, si ella sigue en esa banda. Lo peor es que no puedo decirle que la deje, porque no lo haría, ni por mí ni por nadie.
-Buenos días...-Dice entre dientes. Gira su cabeza hacía arriba, y su mirada se encuentra con la mía. Tiene algunas ojeras y la cara desmaquillada, es preciosa. 
-Hola-Le sonrío y ella se incorpora un poco, se desliza sobre mí y besa suavemente mis labios, siento como se expande por dentro de mí, y una felicidad me invade repentinamente-¿Has dormido bien?
-Mmm...-Se frota los ojos y se estira hacía atrás-Bastante bien, el poco rato que he dormido, claro-Ríe coqueta y yo le rodeo por el cuello con mi brazo. Y permanecemos así, durante un tiempo. Ella  con la cabeza apoyada en mi pecho, mientras con su mano hace leves caricias sobre mí, y yo acariciándola su pelo.
-¿Qué se supone que va a pasar ahora, Ale?-Ella gira su cabeza y vuelve a mirarme, esta vez con los ojos abiertos, y veo como su gesto cambia radicalmente. Yo trago saliva.
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MATADME LO SÉ, SOY LO PEOR DEL MUNDO :c he tardado como mil años en subir y no es justo, pero esta semana entre los exámenes finales, BT, Justin en mi país... No he tenido tiempo de nada, pero ea, ya está aquí. Espero que os guste, aún que sea un poco mierda, es todo lo que he podido hacer en estos días porque he estado atacaita' lol bueno ya he terminado los exámenes (VIBAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH) y subiré mas seguido, I promise :3 Gracias por seguir ahí, a pesar de la tardanza :'') 


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