lunes, 15 de abril de 2013

Capítulo veintiséis


Justin.

-Gracias-Le dice Ryan a la joven camarera del local al que me ha traído, seguidamente le guiña un ojo. Yo suelto una carcajada-¿Qué?
-Nada-Digo levantando las manos a la altura de mi cara.
-Bueno-Dice antes de darle un trago a su cerveza-Entonces, ¿Serás capitán?
-Supongo-Me encojo de hombros-Temporalmente, hasta el sábado. Después no sé lo que pasará-Sonrío-¿Y tú?
-¿Yo qué?-Dice con una mirada confusa.
-¿Te vas a apuntar al equipo de fútbol la temporada que viene?-Él me responde con una sonora carcajada.
-Claro que no, Justin. Yo estoy en un mundo muy diferente al tuyo-Dice agachando la cabeza, y puedo percibir un punto nostálgico en su voz.
-No puedo entenderlo-Digo negando con la cabeza, él me mira-Te encanta el fútbol y por estar en una banda no puedes jugar en un equipo escolar. ¿Qué tiene de malo?
-Nunca entenderás Justin, si me uno al equipo, ellos me romperán las piernas-Dice carcajeando.
-¿Alguna explicación tendrán, no?-Le digo exasperado.
-No podemos distraernos con nada, eso es todo-Se encoge de hombros.

Voy a replicar de nuevo, cuando Ryan me hace un gesto con su mano para que no siga. Le sonrío algo avergonzado, por el hecho de que me he puesto demasiado pesado con el tema y no debería ser de mi incumbencia. Doy un último sorbo a mi refresco antes de terminarlo y cuando lo dejo sobre la mesa, Ryan me esta observando. Frunzo el ceño y arqueo las cejas.

-Lo siento... Sólo-Pude notar como él se ponía nervioso-Es que te pareces mucho a tu padre.
-¿Qué dijiste?-Le dije asombrado ¿Qué sabía él sobre mi padre? Apreté mis puños bajo la mesa. Calma Justin, puede que hayas oído mal.
-Eso-Sonrió incómodo-Tu padre. Los dos no paráis hasta que conseguís una explicación o simplemente lo que queréis. Eso contaban.

Ryan cambio totalmente el gesto, ya no parecía divertirle la situación, ya que se volvió un tanto áspera. Él agachó la cabeza, mirándose sus manos que se entrelazaban nerviosas entre ellas. Yo no podía dejar de observarle con los ojos abiertos como platos, sin dar crédito a lo que acababa de decirme. La realidad me golpea de repente, y es que Ryan conocía a mi padre.

-Tú...-Dije con un hilo de voz-¿Conocías a mi padre?-El miedo se apoderó de mí instantáneamente.

"Ten cuidado Justin, no podrás estar con todo el mundo. A menos que confíes en ellos, no les cuentes sobre tu pasado y tu padre, no hables sobre ello a nadie" Las palabras de mi madre se repetían una y otra vez en mi cabeza. ¿Qué pasa si son ellos los que conocen mi pasado, incluso sobre mi padre? ¿Qué si ya todos lo sabían? ¿Estaría a salvo de lo que mi madre cree que me podría pasar?

-Perdona Justin, tengo que irme-Dijo levantándose de la silla. Antes de que pudiera irse, le agarre con fuerza del brazo.
-Por favor...-Le rogué. Ryan asintió y se sentó de nuevo. Sentía como mis ojos se cristalizaban, de furia, de tristeza, quién sabe.
-Está bien ¿Qué quieres saber?-Pregunto, apoyando sus manos entrelazadas sobre la mesa.
-¿Cómo sabes que Jeremy Bieber era mi padre?-Trague saliva, realmente estaba aterrado. Podía sentir como mis dedos templaban bajo las mangas de mi chaqueta.
-Ale me lo contó-Apreté mis puños una vez más, tanto, que los nudillos se ponían de un color blanquecino de la fuerza que emergía sobre ellos. Recuerdo perfectamente haberle dicho a Ale que no dijera nada joder-Pero no es lo que tú crees-fruncí el ceño-Ella sabía perfectamente que no tenía que contarlo pero-Ryan rodó los ojos-ella quería mantenerte a salvo, y necesitaba mi ayuda-Asentí, comprendiendo. Pero había algo que se me escapaba.
-¿De quien?-Le pregunté. 
-De nuestros superiores-Dice bufando-Si Héctor o Frank, incluso alguien de la banda, se enterasen de que el hijo de Bieber está vivo, te querrían meter en la banda-
-¿Qué me estás diciendo exactamente Ryan?-Le dije, dando un fuerte golpe en la mesa, que hizo que algunas personas dentro del local se fijarán por un momento en nosotros. Entonces la realidad me golpeó en toda la cara nuevamente-Él era el jefe de tu banda...-Susurré para mí.
-Lo siento Justin, pensé que tú lo sabías-Me paso una mano por el hombro.

Es como si me hubieran acuchillado y hubieran sacado la hoja en el mismo instante. Mi padre murió por estar en una banda, y todo este tiempo no me he parado a pensar, lo tenía delante de mis propias narices. Me froto la nuca, decepcionado. Ale. Ella no me lo dijo, pero ella sí que lo sabía, estoy completamente seguro.

-Tengo que irme Ryan-Le digo levantándome-Gracias.-Y me voy lo más rápido que puedo de ese sitio. 

¿Cómo no lo imaginé? Soy un estúpido. Ella no me dijo nada, porque sabe las consecuencias, sabe perfectamente que querré sacarla de ahí, y no se equivoca.


Alejandra.

Cuando llego a casa, después de preparar todo para esta noche en el almacén, decido echarme un rato para estar completamente alerta esta noche. Scott, el jefe de la que era nuestra banda rival hace unos años. Por ese entonces yo llevaba unos meses en la banda, me estaban enseñando a manejar armas y todo el proceso que conlleva estar dentro de esto. En mi primer trabajo, en un intercambio él y algunos de sus hombres aparecieron, y me sentí vulnerable. Me llevaron a su almacén, jugaron conmigo, me hicieron cortes por todo mi cuerpo y me retuvieron allí por un tiempo. Mi banda no se quedó atrás, y dieron un golpe contra ellos, en forma de venganza. Todo explotó y a mí me sacaron de ese infierno. Era demasiado pequeña para comprender lo que estaba pasando, en ese momento yo pensaba que todo esto era un juego y una distracción para no pensar lo arruinada que estaba mi vida sin apenas haber llegado a los 13 años. Y ahora estoy atada a esto, porque les deberé esa deuda por siempre, y me odio por ello. Si tan solo pudiera volver a ese momento, ahora mismo preferiría haber muerto. Cierro los ojos con dureza, tratando de parar a mis estúpidas lágrimas que amenazan con querer salir. Unos golpes en la puerta de mi habitación me sacan de todo, me froto la mejilla con la mano, intentando quitar algún resto de ese jugo salado que ha conseguido escapar de mis ojos acuosos.

 -¿Qué pasa?-Abro la puerta y es Héctor.
-Sólo venía a comprobar si estabas lista para esta noche.
-Lo estoy-Le digo algo cortante, él se muerde el labio.
-¿Puedo pasar?-Pregunta suavemente. Yo le abro la puerta completamente y le hago un gesto con la mano para que pase y él me sonríe. ¿Qué coño querrá? 
-¿Qué está pasando?
-Nada, solo quería hablar contigo-Se sienta en la cama y yo tomo asiento a su lado-Más bien quería advertirte Ale-Frunzo el ceño-Esa gente no se anda con tonterías y menos Scott, ya lo sabes.
-Héctor, no voy sola. Además, ese capullo ni me tocará-Le digo con voz pesada.
-Lo sé, solo decía-Se encoge de hombros-Pero bueno, ya sabes, la ira puede jugarte malas pasadas a veces.
-Lo sé, lo controlaré-Le convenzo.
-Está montando una banda y no sabemos todavía quiénes son los integrantes-
-Héctor-le corto-Estaré bien ¿A qué viene esta muestra de interés?-Le pregunto alzando una ceja, cansada de su juego.
-Mira-Puedo ver como su Nuez baja suavemente-Sólo ten cuidado ¿Vale? Frank no me lo perdonaría si te pasará algo. Sabes que soy tu tutor.
-No Héctor, solo me mantienes por Frank y por la banda, soy mayor de edad ¿Recuerdas?
-Cierto, en ese caso-Se encoge de hombros-Suerte-Se levanta y se va ¿Qué acaba de pasar aquí? Héctor nunca se preocupa por mí de esta forma, ¿Habrá algo detrás? Aparco el tema por un momento y proceso nuestra conversación, tiene razón. Es peligroso, pero y qué ¿No lo es todo lo que hacemos? Pienso en hacerle una visita a Justin, y al instante sonrío. Me acerco a la ventana y veo que esta en su cuarto, escuchando música en la cama. Algo le está rondando en la cabeza, lo sé por la expresión de su cara.

Compruebo que el coche de su abuelo no está en el garaje antes de llamar a la puerta de la casa de Justin. Algún día me gustaría conocerlo, y a su familia también. Pero ellos pensarán de mí como todo el mundo piensa, mal. La gente suele hacerlo con nosotros constantemente, se creen que saben cosas, pero en realidad esas cosas que cuentan resultan ser peores realmente. Llamo dos veces al timbre, y oigo unos pasos avanzar hasta la puerta, pero nadie abre.
-¿Hola? ¿Justin?-Digo pegando el oído a la puerta-Soy yo.-Caigo encima de él, ya que ha abierto la puerta.

Él cierra la puerta detrás de nosotros y vamos al salón. Se cruza de brazos y me mira con una mirada inescrutable.

-Justin ¿Pasa algo?-Le digo confusa.
-No lo sé-Sonríe cínico-Dímelo tú Alejandra. ¿Pensabas que no me iba a enterar?
-No entiendo lo que me estás diciendo-Le digo mordiendo mi labio inferior nerviosamente.
-¿Creías que era un idiota?
-Justin yo-
-No-Dice alzando una de sus manos, poniéndola en frente de mi cara. Realmente no sé de que coño está hablando.
-Yo sólo venía a verte, no a que me trataras así-Le digo molesta, con ira en mi voz. Al ver que él ni si quiera me miraba bufé-¿Me vas a decir qué coño te pasa?
-Mi padre era el jefe de tu banda, y tú te lo callaste como una verdadera zorra-Me escupe las palabras en mi cara. En ese momento me quedo pálida, sin saber qué decir o qué hacer.
-¿Cómo lo has sabido?-Le digo en un susurro.
-¿Y eso qué más da?-Me dice. Le miro a los ojos un instante y me encuentro con sus ojos oscuros de rabia, esto no pinta bien.
-No puedo creer lo que me acabas de llamar-Le digo en un sollozo.
-¿Por qué no me lo dijiste?-Me grita-Oh, pensabas que te haría salir de ahí ¿Verdad?-Dice Justin, ignorando completamente mi anterior comentario.
-No quería hacerte daño ¡joder!-Le grito esta vez yo-Lo hice por ti.
-Bueno verás nadie te pidió que lo hicieras-Dice cínicamente.
-Lo siento, yo sólo-
-Lárgate-Dice en un tono severo.
-¿Qué?
-Que te largues, ahora-Me dice elevando el tono.
-Bien.-Aprieto mis puños, y contengo mis ganas de pegarle un puñetazo en toda su mandíbula.
Justin cierra la puerta con un portazo que suena como un gran estruendo y me estremezco. Vuelvo a casa arrastrando mis pies, sólo lo hice para protegerle, no quería esto. Todo esto se ha complicado más de lo que pensaba y si ahora Justin decide decir algo de su padre por ahí... Dios sabe qué le pasará si Frank se entera. Esta claro que ahora mismo no tengo los 5 sentidos alerta para ir a matar a Scott, pero no puedo hacer otra cosa nada más que enfrentarme a él.

Para saber que has leído el capítulo, ¿Puedes darte RT  Aquí , por favor? :)

Espero que os guste el capítulo, siento la tardanza. Gracias a todos los que leen la novela, que aún que no comenten, sé que están ahí y bueno, por lo menos con la visita sé que alguien lee lo que estoy haciendo <333

4 comentarios:

  1. Muero!!! Como la dejas tan asiii?!?! ME ENCANTA! Espero que subas el siguiente pronto que no puedo esperar!! Un besoo :) ^^

    ResponderEliminar
  2. SIGUIENTEEEEEEEEE. QUÉ HIJA DE FRUTA ERES, COMO TE GUSTA DEJARNOS CON LA INTRIGA... PUES ESO QUE NO QUIERO QUE SE PELEEN :(. Pd: soy la @miiriammc, que te he comentado por aquí que me pillaba más cerca, un besi ^^

    ResponderEliminar
  3. maaaas, siguiente porfa pliss, quiero saberlo todo ya, ahora mismo, jajajajajajaja :) Espero que en nada subas otro capiitulo, un beso:))

    ResponderEliminar
  4. Nooooooooooooooooooooooooooo, tío. Noooooooooooo.
    ¿POR QUÉEEEEEEEEEEEEE? XQ XQ XQ XQ XQ XQ XQ XQ XQ
    Jo, que no quiero que estén peleados, que ella lo hacía para protegerle, cago en todo. Que FUCKIIIIIIIIIIIIIIIIN.
    Estonopueser. Que no. No, HOSTIAS.
    Justin se ha pasado. Se ha pasado un huevo. ¿Insultarla? ¿Encima de que le ha protegido? Pue' ahora que le den. Que vaya a pedirle perdón a Ale, digo, tsts.
    Siento haber tardado en comentar, lo iba hacer el viernes, pero es que no me dejaba .______________________________. y ayer no estuve en mi jaus.
    Bueno, ezo kezo.
    tkmiiiiiiiiiiil HAD <3.

    ResponderEliminar

Déjame saber tu opinión (: